HALCÓN PEREGRINO EN PLENA CIUDAD,
OBSERVANDO SUS PRESAS DESDE UN EDIFICIO. |
PERICO CORDILLERANO
(FOTO DE RODRIGO MORAGA WWW.AVESDECHILE.CL) |
HALCÓN PEREGRINO ATACANDO A UN GRUPO
DE AVESQUE REALIZA EL LLAMADO "EFECTO DILUCIÓN". |
En el sector de El Yeso en el Cajón del Maipo, cerca de unas construcciones antiguas abandonadas, me encontraba haciendo un monitoreo de aves en estaciones de conteo. Las estaciones de conteo son puntos en donde uno cuenta cuántas especies ve (diversidad) y cuántos individuos de esas especies son (abundancia). Se suponía que yo, como ornitólogo, me dedicaría al conteo de aves no rapaces, pero mientras realizaba mi trabajo volaron rápidamente un grupo de becacinas y perdices que no superaban las diez, y no pude evitar sacar mi veta de "rapazólogo" en ese momento, y sospechar de algún depredador aéreo merodeando.
Esto me llamo la atención, ya que me encontraba solo y la conducta que presentaron al volar fue de huida y con mucho temor (ya que yo estaba escondido). Pronto y casi al final del conteo, que dura cinco minutos por punto, apareció un conjunto de doce pericos cordilleranos (Psilopsiagon aurifrons) que volaban agrupados a baja altura, aproximadamente a tres metros del suelo. De pronto generaron algo conocido como "efecto dilución", comportamiento colectivo en que los pericos se reúnen y vuelan sincronizadamente y muy juntos entre sí, con el objetivo de disminuir la probabilidad de ataque de un depredador aéreo. En el cielo se veía un punto, el cual comenzó a caer muy rápido y sorpresivamente atacó al grupo de pericos cordilleranos, tomando a uno y llevándoselo. Ese punto sin duda tendría que haber sido un halcón, decía yo. Mi sorpresa fue mayor al verificar que se trataba de un halcón peregrino de la raza "tundrius".
El halcón peregrino (Falco peregrinus) es un ave rapaz diurna que está presente en todo el mundo. En Chile podemos encontrar dos razas, una llamada "cassini" y la otra "tundrius". La segunda es migratoria y realiza un viaje de cerca de 10.000 kilómetros desde el norte de EE.UU. y Canadá, y llega a Chile, donde reside en la época de verano. Posteriormente, migra nuevamente al norte. El halcón peregrino es considerado el ave más rápida del mundo, pudiendo alcanzar los 290 km/h en vuelo picado, lo que se demostró en un experimento exhibido en "The National Geographic", donde los estudiosos subieron a un avión llevando un halcón hembra hasta los 3.700 metros de altitud, previa instalación de un detector de velocidad en una de las plumas de su cola, que enviaba los datos a un computador central. Un paracaidista se tiró y, desde el aire, lanzó una bola de cuero con un pequeño trozo de carne, a modo de presa, que el halcón siguió, y así pudieron medir la velocidad de la caída.
Esta ave rapaz está protegida por ley en Chile y en todo el mundo, ya que es una especie amenazada, y no se sabe cuántos ejemplares hay en nuestro país. Lo que se conoce es que es ornitófaga (consume aves) y puede nidificar en riscos a gran altura y en edificios en grandes ciudades. Actualmente es muy habitual verla en Santiago, ya que por la expansión de la ciudad estamos ocupando su hábitat. Además, buscan lugares con concentración de presas como palomas, actuando como controladora de plagas.
Finalmente, hago notar dos cosas que asombran en este relato. Una es la velocidad de vuelo que alcanza esta ave, 290 km/h.; y la otra, la distancia recorrida, de cerca de 10.000 kilómetros. Ambos argumentos la hacen merecedora del apodo de "Proyectil Alado". Quien se interese por encontrar mayores detalles de esta y otras especies de rapaces, visite www. peregrinefund.org y www.globalraptors.org.