Para nadie es noticia que en Chile, durante este gobierno, instituciones públicas que habían gozado de tradicional prestigio, respeto y confianza han ido perdiendo, una tras otra, la credibilidad de la ciudadanía, desembocando en una verdadera crisis institucional. Deliberada manipulación de cifras, ineficiente aplicación de instrumentos y escasa rigurosidad administrativa han llevado a la publicación de datos erróneos; cuestión gravísima, pues son los que arrojan indicadores decisivos sobre los que se trabaja para la implementación de políticas sociales en beneficio de la población. Por si alguien no sabe de qué estoy hablando, paso a enumerar: hablo de la encuesta Casen –dependiente del Ministerio de Desarrollo Social- para medir la pobreza, de la que la CEPAL terminó desvinculándose, luego de una serie de graves cuestionamientos que afectaron la veracidad de sus resultados; hablo del Censo -dependiente del INE-, que, a un año de su aplicación, aún nos tiene en ascuas y sin saber con exactitud cuántos chilenos somos realmente; hablo del SERVEL, que para las últimas elecciones municipales esperaba que Salvador Allende fuera a votar a Estación Central, ya que todavía figuraba inscrito en el padrón electoral.

Mejor no sigo.

Eso sí, no hay que desanimarse; no solo en Chile existen instituciones corruptas trabajando para el gobierno de turno. Mirando el segmento internacional del noticiero, supe que en Venezuela hay una enorme escasez de papel higiénico, que ha llevado a sus autoridades a importarlo desde algún amigo país en grandes cantidades. Noticia extraña, pero hilarante. Indagando un poco más a fondo di con la explicación oficial para el fenómeno que tiene al país con sus partes pudendas al borde de la pestilencia: en Venezuela no hay papel higiénico porque, según el presidente del INE de ese país, la gente tiene mejor nivel de vida y, por tanto, está comiendo más. Otra versión dice que no hay porque su precio, como el de otros productos, está controlado por el Estado, y se vende demasiado barato, por esto, ningún empresario quiere producirlo ni importarlo.

Pero veámosle el lado humorístico al asunto y vamos a lo nuestro, a las palabras. Me quiero referir a la explicación del gobierno de Maduro, y se me ocurre una especie de silogismo para el caso:

En Venezuela no hay papel higiénico/ No hay papel higiénico porque la gente tiene mejor calidad de vida y come más/ Quien come más va más seguido al baño y gasta más papel higiénico/ Calidad es mejor que cantidad. Luego: Al gobierno de Venezuela le importa más la calidad de la cagada, que la cantidad de papel higiénico para limpiarse el culo.

¿Qué es un silogismo?

Un silogismo es un argumento que consta de tres proposiciones, la última de las cuales se deduce necesariamente de las otras dos. Aunque, en sentido amplio, se puede aplicar a cualquier razonamiento deductivo riguroso. Fue Aristóteles el primero en analizar esta forma de razonamiento lógico, que consta de dos proposiciones llamadas premisas o antecedentes y de una tercera denominada conclusión o consiguiente.

En este proceso deductivo juega un importante papel una de las premisas, que realiza una función coordinante o de término medio.

Veamos unos ejemplos de silogismos:

Todo hombre es mortal / Sócrates es un hombre / Luego: Sócrates es mortal.

La Tierra gira en torno al Sol / La Luna gira en torno a la Tierra / Luego: La Luna gira en torno al Sol.

A continuación compartiré una serie de silogismos tomados de mi ya habitual sitio www.1de3. com, en los que se llega a conclusiones cómicas a partir de unos procesos lógicos algo especiales.

Dios es amor/El amor es ciego/Stevie Wonder es ciego. Luego: Stevie Wonder es Dios.

Pienso, luego existo / Las rubias tontas no piensan / Luego: Las rubias tontas no existen.

Mi amigo dice que no es tonto porque sale con una rubia inteligente / Si una rubia inteligente saliese con mi amigo sería una tonta / Como las rubias tontas no existen, mi amigo no sale con nadie / Luego: ¡Mi amigo es maricón!

Me dijeron que no soy nadie / Nadie es perfecto / Luego: Yo soy perfecto.

Pero solo Dios es perfecto / Y Stevie Wonder es Dios / Luego: Yo soy Stevie Wonder. ¡Oh, cielos, soy ciego!

Cuando bebemos alcohol en exceso, terminamos borrachos / Cuando estamos borrachos dormimos / Cuando dormimos no pecamos / Cuando no pecamos, vamos al Cielo / Luego: Para ir al Cielo hay que ser un borracho.

Un queso suizo tiene agujeros / Cuanto más queso más agujeros / Un agujero ocupa el espacio que ocuparía el queso / Cuanto más agujeros menos queso / Luego: Cuanto más queso, menos queso.

A quien madruga Dios le ayuda / Quien madruga duerme por la tarde / Quien duerme por la tarde no duerme por la noche / Quien no duerme por la noche, sale de juerga / Luego: Dios ayuda a quien sale de juerga.

Beber mucho alcohol mata las neuronas / Los primeros en morir son los más débiles / Luego: El alcohol mata las neuronas más débiles.

Si mueren las más débiles, quedan las más fuertes / Las neuronas más fuertes son las más inteligentes / Luego: Cuanto más alcohol bebo más inteligente me hago.

A los trabajadores no les queda tiempo para nada / Los vagos tienen todo el tiempo del mundo / El tiempo es dinero / Luego: Los vagos tienen más dinero que los trabajadores. Para ser rico, no hay que trabajar.

Nada es mejor que la felicidad eterna / Cualquier cosa es mejor que nada / Luego: Cualquier cosa es mejor que la felicidad eterna.

Yo soy Dios y, por tanto, ciego / Dios ayuda a quien sale de noche / Yo salgo por la noche / Luego: Yo me ayudo a mí mismo.

Pero… ¿cómo diablos sé que es de noche si soy ciego? ¿Es que soy muy inteligente porque bebo mucho alcohol? ¿Es que soy perfecto? ¿O es que no soy nadie? ¿Siempre encuentro el camino a casa (el Cielo) porque estoy siempre borracho?… ¿Tendrán algo que ver los agujeros del queso?

¡Hasta la próxima!