| Versión electrónica de la Revista Dedal de Oro. Nº 65 - Año XI, Invierno 2013 |
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CORRESPONDENCIA Y OTROS... |
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UNA REVISTA CON CALLE :
Hace unos meses, una linda mañana, la callecita junto a la casona en que funciona la redacción de esta revista amaneció con nombre: Calle Dedal de Oro. Una buena sorpresa y una muy acertada decisión de las autoridades competentes. |
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PREGUNTA PARA EL MÁRMOL :
Un día de enero de 2013 la niña Florencia, de 10 años, acompañó a su madre hasta la redacción de esta revista, lugar en que hay una antiquísima máquina de escribir que perteneció al Premio Nacional de Literatura Eduardo Barrios, autor de El Niño que enloqueció de amor, entre otros libros. La niña estaba entretenida con la máquina y de pronto preguntó: ¿Mamá, estos son los computadores de antes? |
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CARTA Y FOTO AL DIRECTOR :
Hola don Juan Pablo : Yo tomé esta foto porque me sorprendieron los colores del abejorro y que éste se pudiera parar en este cardo, porque yo al poner mi mano me pinchaba. La foto fue tomada el el pueblo Lautaro (sur de Chile), camino al río Muco, en el verano 2013. Atte.,
Trayen Calquin Canelo.
(29/10/2002, 10 años.) |
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RECUERDO DE UN DÍA DE VERANO :
El domingo 10.3.2013, después de almuerzo, los cielos sobre San José y su entorno se oscurecieron naranjamente. Un incendio en el sector de El Toyo, a la altura del río Colorado, cubrió de espeso humo el entorno. Los pájaros volaron, los peces nadaron profundo, los perros aullaron como si el maligno anduviera suelto, las señoras se santiguaron, los viejos hicieron la señal de la cruz, los conejos buscaron sus cuevas, los automovilistas se apresuraron de vuelta a la capital, las fotos aslusivas invadieron facebook... (A propósito, ésta fue hecha junto a la casa en que se edita Dedal de Oro.) Y luego... todo pasó, el mundo entró en su normalidad y la rutina llegó nuevamente a la vida de los seres de este mundo... |
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CARTA ESPONTÁNEA AL DIRECTOR SOBRE UN ROBO MUY MENTADO :
Negligencia
¿Qué clase de anzuelo me toco morder esta vez? Justo cuando creí haber sido capaz de enfrentarme a la mirada divina del sol, ingenuamente pude haber saboreado un espejismo dulce y efímero que se desvanece al regresar a la comodidad del hogar. Otra vez fui condenado por mi retorno y volverás a verme marchar la monótona danza del moribundo. Aceptaré el castigo que merezco por alimentarme siempre del cebo de las jaulas.
Una vida de matices tan variados acabó por irritarme la pupila. ¡En qué momento se acabó el juego que tanto esperamos! Los resplandores desearon culminar su viaje en una mente pueril, lejos de los análisis severos; el universo tomó vida a través de mi estado absorto que como un gran tesoro guardé dentro de mí. Pero entonces me encuentro inmerso en el drama de la comedia universal y la brisa fresca no encuentra refugio en una mente obstinada. Aceptaré el castigo que merezco por descuidar el anhelo joven…
Con el amanecer llegaron siempre las primeras pistas de un verano jubiloso, todos los eventos del día fueron suficientes y con la completa revelación de los sentidos pude fácilmente percibir el más elaborado fruto de los lenguajes cósmicos. Creí al menos tener asegurada esta pasión para redimirme de alguna pálida rutina, pero con el tiempo, solo pude sentir que me dejaban los astros y mi lenguaje poco a poco se tornó urbano. Aceptaré el castigo que merezco por haber sido capturado en el juego…
Gabriel Salas Díaz.
Domingo , 26 de mayo 2013.
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MAIL A LA REVISTA DE PARTE DE UN SURREALISTA SALVAJE :
Querido amigo, te cuento que por el Camino al Volcán, frente de la casa de mi madre, se encuentran detenidos dos o tres carros policiales y otros dos vehículos encargados por robo. Me explicó un carabinero que se trata del robo del cajero automático de la Copec del pueblo. Por lo que me cuentan carabineros, en torno a la Copec del pueblo pusieron miguelitos y cerraron calles en buena parte del pueblo, y los antisociales se habrían escapado por Camino al Volcán hasta el puente del estero San José, al lado de nuestra casa. Yo estaba durmiendo cuando escuché un fuerte: "¡baja, baja de ahí, baja del auto!", hasta que se escuchó un disparo. Al minuto mis perras dejaron de ladrar, esperé un rato, por temor a nuevos disparos, y salí. Un vecino amigo tomó unas fotografías…
Hace pocos minutos me entré a la casa por indicación de mi padre. Claramente es peligroso. Escuché hace muy poco rato un gripo femenino muy fuerte: "¡nooooooo, noooooooo!", y ahora hay más y más sirenas de carabineros. Escucho a la PDI llegar. Por lo que entiendo, seguirán por el camino a Los Rulos y a Lagunillas. Hace poco bajaron los carabineros al estero San José por el terreno del Banco Estado. Puente y sifones han sido registrados. Por lo que oigo, siguen llegando al lugar más vehículos policiales. Está claro que será una búsqueda intensa. Nada, yo que estaba durmiendo después de tomarme unas piscolas en la Cascada de las Ánimas y recordando unas imágenes increíbles mostradas por Astorga en sus viajes. No entendía nada, si era un sueño, una película policial… ¿Me decían a mí "baja del auto"? Y los disparos, ¿a quién? Jajaja, me sentí protegido por los muros de adobón de 50-60 centímetros de ancho, pero la curiosidad es mayor y salí a copuchar.
Espero que tengas un lindo día del patrimonio cultural. Buena jornada.
ETERNO SALVAJE.
(Pablo Astorga. 25/10/2012.)
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