:: PALABREANDO.
   Pobladores de La Reina y Vecinos de La Pintana.

Por Vania Ríos Molina.
Como no hay primera sin segunda y considerando la riqueza del tema, en esta edición seguiremos abordando la tríada tabú-eufemismo-disfemismo. Quiero aclarar que los ejemplos aparecidos en el número anterior corresponden a las voces más utilizadas y fueron extraídos de serios trabajos realizados por profesionales vinculados al mundo de las letras. No corresponde, por tanto, pensar que la intención es mostrar gratuitamente términos que puedan provocar ataques de pacatería en algunas almas sensibles. El artículo quedaría incompleto y sesgado si se muestra sólo la cara "bonita y eufónica" de los usos que le damos a la lengua. Sería censurar, omitir una de las vertientes más prolíferas del lenguaje popular chileno: las llamadas "malas palabras", palabras que -por cierto- han sido reconocidas por la Real Academia Española de la Lengua. Propongo una lectura con altura de miras, atendiendo a lo instructivo y jocoso, y no a supuestas intenciones tendientes a influenciar negativamente al lector.

Como sabemos, todas las culturas poseen palabras tabú, aquellas que se evita mencionar generalmente por temor, respeto o vergüenza. En su lugar se recurre a los eufemismos, figuras retóricas que dan una connotación más agradable a la palabra; y en mayor medida, se apela al disfemismo, que agrega una cuota de picardía y humor para hacer menos triste, vergonzoso o desgraciado un determinado momento, palabra o acción.

Veamos nuevos ejemplos:


TABÚ: VAGINA.
Eufemismo: Sapito, cosita.
Disfemismo: Concha, champa, chucha, choro, zorra.

TABÚ: MASTURBARSE.
Eufemismo: Autosatisfacerse sexualmente.
Disfemismo: Correrse la paja, lavar la ropa a mano, la manuela palma, tirarse la corbata, pajearse.

TABÚ: IR AL BAÑO A ORINAR.
Eufemismo: Ir a vaciar la vejiga, hacer pipí.
Disfemismo: Ir a echar la corta, ir a Pichilemu,
ir a mear, exprimir el riñón.

TABÚ: IR AL BAÑO A DEFECAR.
Eufemismo: Ir a evacuar, hacer popó.
Disfemismo: Ir a cagar, ir a Chicago, ir a sentarse al trono.
 

TABÚ: PEDO.
Eufemismo: sufrir de meteorismo, tirarse un pun.
Disfemismo: Tirarse un peo, desgranarse, andar prendido, reventarse.

TABÚ: VOMITAR.
Eufemismo: Tener náuseas.
Disfemismo: Llamar a guajardo, güitrear.

TABÚ: TENER DIARREA.
Eufemismo: Andar con indigestión, con colitis.
Disfemismo: Andar con churretera, irse por el water.

TABÚ: ANDAR CON MENSTRUACIÓN.
Eufemismo: Andar con el período, con la regla, enferma.
Disfemismo: Andar con la Juana Meneses (la que te "huevea" todos los meses), con la marea roja, andar en los días erre, con la ruler.

Pero no sólo referirse a algunas partes del cuerpo y a sus procesos fisiológicos genera cierto decoro en los espíritus más recatados; últimamente se ha puesto de moda solapar crudas realidades en el ámbito político-social, recurriendo a eufemismos que no provoquen mayor impacto en el interlocutor. Veamos:

El vagabundo de antaño, ése que no tiene donde vivir ni dormir, hoy día se conoce como "persona en situación de calle".

Los países pobres -hasta los que están sumidos en una miseria absoluta- son llamados "países en vías de desarrollo" o "países surgentes".

Quienes están moribundos o agónicos son ahora "enfermos terminales".

De una persona fea, suele decirse que "es poco agraciada".

Las víctimas civiles de una guerra ahora son parte de los "daños colaterales".

Un negro es un "afroamericano" o "un hombre de color".

La tortura es un "método de persuasión".

Matar al enemigo, masacrarlo es "neutralizar".

Para terminar, una reflexión: ¿Por qué en los noticieros a los habitantes del sector alto se les llama "vecinos" (vecinos de La Reina) ; y a esos mismos habitantes, pero de un estrato social bajo se les denomina "pobladores" (un grupo de pobladores de La Pintana)?

Resultaría extraño escuchar en un boletín informativo: "Pobladores de la Reina protestaron frente a la Municipalidad"… Igualmente, sería raro oír: "Un grupo de vecinos de la Pintana se tomó un terreno abandonado". Dos apelativos distintos para referirse a una misma agrupación humana.

En fin… Cosas del lenguaje. ¡Hasta la próxima!